Marc Gené regresa al podio de las 24 Horas de Le Mans con Audi

.- El único español que ha ganado la mítica carrera francesa acabó segundo en la edición de este año con el Audi R18 e-tron quattro número 1.
.- Gené, piloto reserva del equipo Audi, sustituyó a Loïc Duval tras sufrir éste un accidente en los entrenamientos previos.
.- Junto a Tom Kristensen y Lucas di Grassi completó el doblete de la marca, que logró su décimo tercer triunfo con Fässler/Lotterer/Tréluyer

Madrid, 26 de junio de 2014 – El único español que ha logrado la victoria en las 24 Horas de Le Mans regresó al podio de la prueba francesa al volante de un Audi R18 e-tron quattro. Marc Gené, que logró el triunfo en La Sarthe en 2009, acabó segundo en la edición de este año junto a Tom Kirstensen y Lucas di Grassi con el Audi R18 e-tron quattro número 1, completando su cuarto podio en esta competición. El triunfo fue para otro Audi, el pilotado por Marcel Fässler, André Lotterer y Bernôit Tréluyer. La marca de los cuatro aros conseguía este año su victoria número 13 en 16 participaciones.

Marc Gené es ya todo un veterano en las 24 Horas de Le Mans, donde ha competido en ocho ocasiones. Pero esta vez ha sido diferente. El español figuraba como piloto reserva del equipo Audi, y hasta el jueves no se decidió que compitiera en la prueba con el R18 e-tron quattro número 1. Un accidente sufrido por Loïc Duval en los entrenamientos obligó al equipo a cambiar su estrategia y recuperar a Gené para la competición. El Audi Sport Team Joest tuvo que trabajar a destajo para tener listo el vehículo tras los graves desperfectos causados en el accidente de Duval.

“Me enteré que un Audi había sufrido un accidente al escuchar al speaker. Inmediatamente busqué una televisión y cuando pude ver que la zona en la que Loïc se había estrellado es la más peligrosa del circuito, y cómo había quedado el coche, llegué a temer por su vida” explica Marc. “Inmediatamente acudí al box de Audi, donde me tranquilizaron y me confirmaron que no corría peligro, que era lo más importante. Yo seguí mi programa de entrenamientos para competir en LMP2, pero como piloto reserva de Audi, enseguida me llamaron para sustituir a Loïc”.

El Audi R18 e-tron quattro número 1 quedó seriamente dañado y los mecánicos hicieron un trabajo excelente para tenerlo de nuevo a punto el jueves por la noche para la calificación. Marc y sus compañeros de equipo se dedicaron a completar las vueltas reglamentarias para poder participar en Le Mans, y finalmente calificaron el monoplaza número 1 en séptima posición.

A pesar de todos éstos imprevistos, Gené, junto a sus compañeros Tom Kristensen y Lucas di Grassi, acabaron la prueba en segunda posición, e incluso durante algunas horas llegaron a encabezar la clasificación de la competición de resistencia más importante del mundo, en gran parte gracias al excelente pilotaje del Gené durante los relevos nocturnos, con una conducción impecable justo en los momentos en los que la prueba se pone más difícil.

Marc explica: “durante los entrenamientos libres pude rodar realmente poco con el coche, y mis tiempos no eran del todo buenos, pero estaba tranquilo y seguro de que en carrera sería diferente. Al final fui el segundo piloto más rápido de todos los equipos Audi, y el primero en el coche número 1, considerando la media de todas las vueltas”. Sobre el Audi R18 e-tron quattro y las nuevas reglamentaciones, el piloto español comenta: “Tenemos un objetivo de consumo en cada vuelta, y si te pasas hay que compensar en la siguiente, para no penalizar. Me gusta este concepto, te permite jugar con la recuperación de energía, gestionando las zonas de frenada o cuando encuentras tráfico en pista. Lo realmente importante es ahorrar allí donde se pueda para luego no tener que levantar el pie del acelerador una vez empiezas a pisar al salir de las curvas”.

Precisamente la edición de 2014 ha sido una de las más competidas de la historia, ya que la hegemonía de Audi, que ha ganado 13 ediciones en 16 participaciones, estaba amenazada por los equipos Toyota y Porsche. Pero de nuevo era un vehículo de la marca de los cuatro aros, el pilotado por Marcel Fässler, André Lotterer y Bernôit Tréluyer, el que se llevó el triunfo, secundado por el de Gené y sus compañeros. La carrera fue épica y tras una excelente remontada el Audi R18 e-tron número 1 llegó a liderar la carrera a primera hora del domingo. Sin embargo, un problema en el turbo obligó al monoplaza a parar en boxes sobre las 10 de la mañana y perder el liderato. Volvieron a la pista en tercera posición pero nunca se dieron por vencidos, finalizando segundos a tan sólo tres vueltas del Audi número 2 de Fässler, Lotterer y Tréluyer.

A pesar de entrar en el equipo reemplazando en el último momento a Loïc Duval, y de salir por lo tanto a los entrenamientos oficiales sin apenas haber conducido el coche salvo en algunos test previos, el piloto español de Audi completó una gran carrera, sin que en ningún momento le pasara factura el llevar menos rodaje con el coche de Le Mans que sus compañeros Kristensen y di Grassi. “Ha sido fantástico tener a Tom y a Lucas como compañeros. Kristensen es para mi una leyenda, no es casualidad que haya ganado 9 veces esta prueba. Controla cada detalle, se exige a él mismo, a los ingenieros, al resto de pilotos… Pero me ayudó mucho, e incluso me enseñó algunos trucos que me han venido muy bien”.

Sobre el Audi R18 e-tron quattro y su conducción, Marc explica: “Realmente no es muy distinto pilotar este coche ahora que todo el sistema híbrido y de recuperación de energía es automático. Hay algunas diferencias, como las frenadas, ahora en las rectas levantamos el pie 300 metros antes del punto de frenada para recuperar energía, y frenamos realmente a fondo a 100 metros, cuando antes frenábamos directamente a unos 120 metros. Lo realmente impresionante es la tracción, es increíble cómo se puede acelerar con un coche de esta potencia a la salida de las curvas. También son una gran ayuda los faros láser, es fantástico que Audi aplique estas tecnologías que se ensayan en Le Mans a sus coches de producción”.

Marc resume así las 24 Horas de Le Mans de este año: “No éramos favoritos, y el nuevo reglamento penalizaba a los coches con motores turbodiésel, como el R18 e-tron quattro, pero al final Audi ganó la carrera por fiabilidad, por constancia y, sobre todo, por trabajo en equipo”, explica Marc. “En cuanto a mi participación, en el momento en el que me puse líder reconozco que incluso perdí momentáneamente la concentración. Era demasiado bonito, un cuento de hadas tener opciones de ganar la prueba cuando 48 horas antes ni siquiera iba a pilotar para Audi, y sobre todo con un coche que hubo que reconstruir desde cero. Al final fue una segunda posición que me sabe fantástica, y un nuevo triunfo para Audi, que es lo que importa”.