Noticia
26-10-2009
Timo Scheider y Audi hacen historia en el DTM
.- El piloto de Audi alcanza un nuevo título.
.- Finaliza segundo en la última prueba de la temporada, en Hockenheim.
.- Audi es la primera marca que gana el DTM tres veces consecutivas.
Madrid.- En año de su centenario, Audi ha vuelto a escribir su nombre en letras de oro en la historia de las competiciones automovilísticas de la mano del piloto Timo Scheider. El campeón del año pasado defendió con éxito su título en el DTM de 2009 con su A4 DTM. Ello convierte a Audi en la primera marca que gana el título por tercera vez consecutiva en la historia del DTM, que lleva disputándose desde 1984.
Después de ganar la temporada 2008, Timo Scheider partía decidido a renovar su título en el DTM. Ahora, tras finalizar en la segunda posición en la última y decisiva carrera, disputada en Hockenheim, el piloto oficial de Audi se ha hecho con su segundo título consecutivo.
“Siento una felicidad inmensa por haber podido lograrlo otra vez y de nuevo ante los muchos espectadores que vinieron a la carrera de mi casa”, declaraba exultante Timo Scheider después de la cita que cerraba la temporada”. “Estoy plenamente satisfecho con mi equipo y con mi Audi A4. En ellos está la clave del éxito”.
Con todo, su victoria en la última carrera de la temporada demuestra que el DTM de este año ha estado incluso más disputado que en temporadas anteriores. Scheider había liderado la clasificación desde la segunda cita hasta la undécima y última el año pasado, pero la temporada 2009 ha tenido más suspense. Tom Kristensen, su compañero en el Audi Sport Team Abt Sportsline, se colocó en cabeza del campeonato tras la primera carrera. En la segunda, Timo Scheider tomó el relevo, pero tuvo que cedérselo de nuevo en la cuarta al piloto de Mercedes Gary Paffett. Tras la quinta carrera, el británico debía compartir esa condición de líder con el piloto oficial de Audi Mattias Ekström, que conseguía el empate en lo alto de la clasificación provisional. No fue hasta la sexta carrera, en el Nürburgring, cuando Scheider volvía a tomar la delantera por un margen muy escaso, ya que lograba un punto de ventaja sobre su compañero Mattias Ekström.
Especialmente en la fase en la que el campeonato estuvo sumamente equilibrado, uno de los puntos fuertes de Timo Scheider se mostró de gran ayuda. Y es que el campeón lleva dos temporadas demostrando que, al margen de encontrarse a gusto con el comportamiento de la última generación del Audi A4 DTM y de contar con la
dosis de suerte necesaria en la competición, también posee la capacidad estratégica ideal. Nada de forzar. Al contrario, siempre actúa con prudencia y sentido de la estrategia, tomando decisiones inteligentes y pisando siempre con los pies en el suelo. Simplemente, el estilo de un gran campeón. En la tarde anterior a la carrera de Barcelona, por ejemplo, su coche recibió un embrague nuevo y él se marcó una arrancada perfecta, que le llevó de la quinta a la primera plaza. Fue su segunda victoria de la temporada, después de la de Oschersleben, y sirvió para incrementar su ventaja al frente del campeonato de siete a doce puntos.
Gran competencia
A pesar de su ventaja, Scheider nunca infravaloró a sus rivales. “Nunca he descartado a nadie porque mi ventaja podía esfumarse muy rápido”, afirmó cuando había tenido el título a su alcance antes. De hecho, en Dijon-Prenois sólo alcanzó el 16º puesto en parrilla. Ello no le desconcertó y le permitió avanzar hasta la sexta posición, llegando a la carrera que cerraba la temporada con una ventaja de siete puntos sobre Gary Paffett al frente del campeonato. Sin embargo, la fuerte oposición no sólo procedía de Mercedes, sino también de sus propios compañeros de marca. Mattias Ekstrom también conservó opciones al título hasta la carrera de Dijon-Prenois. “Mattias es un competidor nato. Y todos queremos ser el número uno en Audi. Seguramente él lo dará todo por ganarme”, dijo Scheider, consciente mejor que nadie de la situación antes de la carrera de Francia.
La trayectoria de este piloto de 30 años no fue siempre tan brillante como en la actualidad. Después de iniciarse en el karting con diez años y de conseguir notables logros en diferentes categorías de monoplazas, debutó en el DTM en la temporada 2000, a la edad de 21 años. Para 2005, su carrera en este certamen, huérfana de éxitos, parecía finiquitada. Pero en 2006 volvió al certamen con Audi. Su primer triunfo no llegó hasta su carrera número 79 en el campeonato, el año pasado en Oschersleben. La mala racha estaba rota y después de sólo dos años su clase está fuera de toda duda, con cinco triunfos y nada menos que 15 podios.
Su segunda corona en el DTM trae consigo varios hitos históricos. Además de haber conseguido el tercer campeonato consecutivo para Audi, Scheider, junto a Mattias Ekström, es el único piloto de la parrilla actual que ha ganado dos títulos en la categoría. Y es el primer piloto de Audi que ha ganado dos de manera consecutiva. Antes de Scheider sólo un piloto lo había logrado: Bernd Schneider lo hizo en 2000 y 2001. Curiosamente, muchos medios solían confundir a Scheider con él a menudo el año pasado, por la similitud de sus nombres. Pero eso seguramente será ya algo perteneciente al pasado ya.
“El primer título estuvo rodeado de una gran presión”, afirma Scheider, comparando el de este año con el del pasado. “El segundo se disfruta mucho más”. Y hasta la fecha sólo Bernd Schneider había conseguido defender con éxito la condición de campeón en el DTM. Suena bien que un piloto llamado Schneider, pero sin la “n” pueda ahora repetirlo.