Noticia
13-12-2005
Audi compite en Le Mans con un diésel
.- Estreno mundial en París del Audi R10
.- El motor V12 TDI rinde más de 650 CV
Audi AG vuelve a dar un paso por delante de la competencia: el inventor del motor TDI se convertirá en el primer fabricante automovilístico que luche por una victoria global con un motor diésel en las famosas 24 horas de Le Mans. El nuevo Audi R10, que se acaba de presentar en París, está impulsado por un nuevo motor TDI de 5.5 litros y 12 cilindros, sumamente silencioso y económico.El Prototipo Le Mans, con 650 CV y más de 1.100 N/m de par, produce significativamente más potencia de la que disponían la mayoría de los anteriores coches de competición de Audi, incluído su predecesor, el victorioso R8. Audi se aventura en el inexplorado terreno de los motores diésel con el V12, fabricado completamente en aluminio. Al igual que con la tecnología TFSI, que inicialmente triunfó en Le Mans antes de ser adoptada para la producción en serie, los clientes de Audi se beneficiarán una vez más de las lecciones aprendidas en el deporte del motor.
“Con el A8 4.2 TDI quattro, Audi ha creado uno de los más poderosos automóviles diésel del mundo”, explicó el Profesor Dr. Martin Winterkorn, Presidente del Consejo de Audi AG, en la presentación del R10 en París. “El proyecto de Le Mans ayudará a nuestros técnicos a extraer más aún de la tecnología TDI. Actualmente, el 50% de los modelos Audi están equipados con motores TDI y esperamos que el porcentaje de motores diésel sea aún mayor en el futuro”.
El prototipo R10 con motor V12, equipado con dos filtros de partículas diésel, apenas es reconocible como un diésel gracias a su suavidad de funcionamiento. Los ingenieros de Audi Sport tuvieron que enfrentarse a un gran número de desafíos debido a las peculiaridades del motor TDI. La presión de inyección fácilmente supera los 1.600 bar, logrados en automóviles de producción. La banda de potencia utilizable está entre las 3.000 y las 5.000 rpm, un rango de revoluciones extraordinariamente bajo para un motor de carreras. En el R10, el piloto debe cambiar de marcha con mucha menor frecuencia que en el R8 debido a la favorable curva de par.
El enorme par, sobre 1.100 N/m, no sólo produce demandas extremas del sistema de transmisión del R10, sino que incluso los dinamómetros de última generación de Audi Sport han tenido que ser re-equipados con cajas de cambios especiales capaces de resistir esta inusual fuerza.
Además, fueron necesarios también cambios radicales en el chasis. El Audi R10 tiene una distancia entre ejes significativamente mayor que el R8. Las llantas extremadamente anchas son, hasta ahora, únicas del Prototipo Le Mans. Nuevas tecnologías fueron aplicadas durante el desarrollo del monocasco de fibra de carbono. Chasis, motor y caja de cambios forman una unidad extremadamente compacta y rígida.
“El proyecto del R10 es el mayor desafío que Audi Sport ha afrontado nunca”, dijo el Director de Audi Motorsport, Dr. Wolfgang Ullrich. “La tecnología TDI no ha sido llevada todavía a sus límites en el deporte del motor, y por ello somos los primeros en aceptar este reto. Las exigencias de un proyecto de estas características son, en consecuencia, altas. Proveedores de tecnología de muchos años como Bosch, Michelin o Shell, nos apoyan en este desafío. Juntos tenemos la oportunidad de escribir nuevos capítulos en la historia del deporte del motor y de la tecnología diésel”.
El nuevo Audi R10 completó con éxito sus primeras pruebas a finales de noviembre. Un extenso programa de competiciones está programado antes de las 24 horas de Le Mans el 17 y 18 de junio de 2006, incluyendo las 12 horas de Sebring (USA) el 18 de marzo. El equipo de desarrollo de Audi Sport está encabezado por Reinhold Joest, que también llevó a cabo esta misma tarea durante el proyecto del R8.